Albert Padrol es un amigo inteligente y generoso que junto con otro buen amigo, Pep Bernades, dirige Altaïr: dos librerías en Madrid y Barcelona (ésta una de las más hermosas que conozco) y la revista y editorial de igual nombre, así como la agencia de viajes Orixá. Desde hace años compartimos nuestro gusto por el viaje y los buenos vinos, conversaciones distendidas y complicidades personales y laborales. No oculto la admiración y veneración que le profeso.
Ahora anda empeñado en editar en el sello Altaïr una amplia selección de las crónicas periodísticas de Norman Lewis. Se anuncian tres volúmenes de los que ya ha aparecido el primero: El Expreso de Rangún, Genocidio y otros relatos. Crónicas de viaje 1.
Lewis (1908-2003), además de excelente novelista, era un maestro de la literatura de viaje. Anthony Burgess le consideraba el “decano de los viajeros británicos” y el escritor Auberon Waugh “el más grande escritor de viajes vivo, si no el mayor desde Marco Polo”.
Sus crónicas son amenas, interesantes e imperecederas, y su mirada amplia y abierta: tan pronto nos habla de Ibiza como de Birmania o Brasil. Leer un texto como Genocidio te llena de admiración y espanto. O Retorno a la corrida de toros te hace sonreír al describir una España que el tiempo ya enterró…o tal vez no.
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Paco Goyanes
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